¿Y si Linux fuese Windows, y al revés?

En el blog «Desvarios de un Linuxero» me he encontrado con una historia muy interesante, traducida del original en inglés «Howto switch from Linux to Windows – a users experience«.

Se trata de un relato imaginado, en una hipotética situación en la que Linux fuese el sistema dominante del «mercado» y Windows un total desconocido. Es decir, casi la situación actual, pero al revés.

La conclusión de esta historia, aparte de echarnos unas risas, es que si las cosas fueran como plantea el relato, Windows no sería más que una pura anécdota, un sistema tan malo que no sería ni mencionado.

Podéis leer la traducción de esta historia aquí…

Traducción del original en inglés :

MIS PRIMEROS PASOS CON WINDOWS XP

He oído acerca de un nuevo Sistema Operativo llamado Microsoft Windows el otro día y quería probarlo porque dicen que es fácil de usar y que es intuitivo. Desafortunadamente el autor no ofrece ningún live-cd para probar todo antes de instalarlo. En vez de descargarlo de Internet, como siempre hago, he tenido que ir a la tienda de ordenadores y comprar uno por el precio de 150€. También hay la llamada «Professional Edition» pero costaría incluso mas. Lo primero que hice cuando llegué a casa fue abrir la caja, poner el cd que traía en mi lector de DVD y encender el PC. La pantalla de instalación consistía en un simple fondo azul y un menú fácil de usar. Quise respaldar mis datos primero así que intenté abrir una consola virtual pero lo normal de CTRL-ALT-F1 no funcionó (¿Que diablos?). Tuve que reiniciar, hace una copia y reiniciar la instalación de nuevo. El menú daba la opción «Instalar Windows XP» y la seleccioné.

Entonces hubo un extraño mensaje que decía “Acuerdo de Usuario Final” y tuve que aceptarlo para continuar. No había oído nunca de algo como esto en Linux así que leí la mayor parte del largo texto. No me está permitido distribuir este producto y no haré copias a mis amigos. Era de cualquier forma el extremo opuesto de otra licencia de la que había oído que se llama Gnu GPL. Después de aceptarla con F8 la instalación continuó. Windows no reconoció que tenía particiones ext3 y reiserfs en mi sistema y me dijo que había encontrado un «sistema de archivos desconocido». Siempre había pensado que eran estándares pero puede que estuviese equivocado. Había una opción de borrar todo el disco duro e instalar WinXP y la elegí. La próxima cosa curiosa fue que Windows no crea una partición separada para mis preciados datos y solo crea una gran partición del sistema. “Puede que Windows tenga un sistema de archivos de alta seguridad que haga backups automáticos en caso de perdida de datos” pensé. Como yo tenía un disco relativamente grande no pude seleccionar Fat32 y tuve que optar por NTFS. Tardó un rato formatear el disco.

Desafortunadamente no pude seleccionar paquetes de una lista como siempre hago en Linux, Windows seleccionó todo el solo. Los únicos ajustes que pude hacer fué introducir la fecha del sistema correcta, mi usuario y algo llamado clave de registro. Esta era un numero de 25 dígitos que tuve que introducir manualmente antes de que la instalación continuase. Después de otro reinicio Windows estaba finalmente listo y funcionando, o casi. Windows quería activarse primero. Durante este proceso Microsoft intenta acceder a una web y verificar los datos de registro. ¡Ni de coña! Lo cancelé y Windows me dijo que tenía un periodo de prueba de 30 días después del cual tendría que registrarme. ¡Vaya mierda!

La nueva interfaz de usuario apareció y empecé a olvidar todas las dificultades iniciales. Era un poco raro que no hubiese una pantalla para poder iniciar sesión con el usuario por defecto para el trabajo diario. Por el momento estaba en modo administrador y tenia acceso de root. Eso me hizo sentir incómodo porque mi hermana pequeña tendría los mismos privilegios en ese sistema. Tampoco había opción para ajustar los permisos de los archivos (algo como chmod) manualmente y esto podría ser otro riesgo para una estación de trabajo. Busqué el material de la documentación del sistema para empezar a ajustar mi nuevo sistema como quería pero no pude encontrar nada usable (F1 realmente no ayuda). De repente, un horrible pop-up amarillo apareció en la esquina derecha al fondo de la pantalla. Decía algo como “Nuevo dispositivo encontrado.” Una ventana en el medio de la pantalla me dijo que tenía que insertar el CD del controlador del dispositivo y pulsar en “Continuar”. Al principio no sabía lo que era pero de repente me di cuenta de que un controlador de dispositivo era algo como un modulo. Me acuerdo que venía un CD con mi impresora y lo encontré en una caja en el ático. Pulsé en “Continuar”. Mi nuevo sistema me advirtió que el controlador del dispositivo no había pasado el test de compatibilidad de hardware y que debería probar otro controlador. Estaba un poco asustado de darle a “Continuar” pero finalmente me decidí a hacerlo y todo fue perfectamente. Estaba un poco irritado porque el estúpido mensaje me cabreó pero no tenía tiempo para quejarme. Después de eso instalé todo el hardware y estaba preparado para navegar.

No había cortafuegos ni anti-virus instalado y me sentí un poco inseguro cuando entré por primera vez en la web. Estuve navegando durante dos minutos mas o menos antes de que recibiese un mensaje de “Al Dick” que me ofrecía una ración durante seis años de Viagra. Dejando a un lado que no necesito ese tipo de cosas (¡de verdad!) era increíblemente cabreante. Encontré un how-to en la red para desactivar esos mensajes. El Internet Explorer no tiene filtro de popups y parece atraer publicidad y después de quince minutos mi barra de tareas parecía un campo de batalla de spam. Tuve que cerrar todas las ventanas manualmente. Mi antiguo navegador Firefox traía posibilidad de pestañas incluida pero parece ser que IE tiene sus propias reglas y estándares de navegación. Pero eso fué solo el principio: Cuando quise chatear con mis amigos descubrí que Windows Messenger no soporta ICQ, AIM, TOM ni Jabber. Tenía forzosamente que crear una llamada cuenta de MSN para continuar pero me negué. Cuando quise mirar un DVD nuevo que había comprado en Francia Windows Media Player me dijo que no podía usar mi DVD en el PC debido al llamado “código de región”. Estaba algo confuso acerca de todo esto y le pregunté a un amigo que debía hacer. Me dijo que hay transferencia de datos desde mi PC con Windows directamente a Microsoft con el objetivo de comprobar mis especificaciones de hardware y hacer un chequeo de autenticidad de mi software. Estaba indignado. Estaba pagando un montón de dinero para tener un sistema estable y seguro que respetase mi privacidad y no una basura charlatana con fallos abierta a los demás como la puerta abierta de un granero. Quise echarle un ojo al código fuente para ver si esas recriminaciones eran correctas pero no pude porque ¡no había codigo fuente incluido! No quiero hablar de la llamada «jerarquía de archivos» de XP donde los ficheros de configuración del sistema son accesibles vía C:\Windows\system en vez de /etc. No quieres saber lo que es la desfragmentación (no se necesita nada así en un ordenador con Linux), no hablaré del penoso terminal llamado “command” ni del porqué no deberías nunca abrir archivos adjuntos de los emails con Outlook Express.

Después de que el sistema se colgase cuando quería quemar un CD con el programa de grabación simplón incluido al mismo tiempo que hacía un análisis en una hoja de calculo con la miserable alternativa a OpenOffice de Microsoft llamada “Office XP” que me había costado otros 119€ (Lo conseguí un poco mas barato ya que soy un estudiante) puse todo otra vez en la bonita caja verde y se lo devolví a la tienda. El mismo día instalé Linux otra vez como crítica a un sistema operativo monousuario, medio verde llamado Windows XP que puede que esté preparado para el escritorio en cinco años. Hasta entonces estoy a gusto con mi libertad con BSD, OpenSolaris y Linux.