«I don’t think anyone can make money from the Linux desktop»
Se trata de una frase del fundador y máximo representante de Canonical, Mark Shuttleworth, dicha en una rueda de prensa concedida recientemente a los medios para hablar del inminente lanzamiento de Intrepid Ibex.
Esta frase, sacada de contexto, no tendría sentido. ¿Como puede ser que una empresa que se dedica al desarrollo de una distribución Linux diga que esta no puede ni podrá reportar dinero? En realidad Shuttleworth se refiere al hecho de copiar esta distribución Linux en un CD, meterla en una preciosa cajita, precintarla y ponerla en el mercado para venderla tal cual, como un software por el que hay que pagar. Por la naturaleza de Linux, esto supondría que un usuario sólo tendría que elegir otra distribución del mercado, que fuese gratuita, para ahorrarse este gasto.
Leyendo la entrevista completa, Shuttleworth se refiere a que el modelo de negocio de Linux, al menos en el escritorio, pasa por los modelos ya probados y efectivos de Red Hat o Novell, de ofrecer su software de manera gratuita a los usuarios y empresas, cobrando por servicios de valor añadido, como pueden ser el soporte técnico, la formación de los usuarios, o la gestión de soluciones avanzadas para empresas.
En mi opinión, es un modelo de negocio, no sólo efectivo, sino beneficioso para el usuario y también para las empresas.